Quiérete mucho, adelgaza y busca tu mejor versión

Cuando hablamos de perder peso no estamos hablando  de la  talla de ropa, sino de salud.

La obesidad es la acumulación de una gran masa de grasa que pone, o acabará poniendo, en riesgo tu vida. 

No hay que confundir  obesidad con sobrepeso. No es lo mismo una obesidad mórbida que no solo pone en peligro tu salud si no también tu calidad de vida, que el hecho de que te sobren unos pocos kilos y tengas algunos michelines en la tripilla.

Hoy en día se habla mucho de que la obesidad no es una enfermedad, que puedes estar obeso y tener muy buena salud…bien, aceptémoslo!!! Pero sin ninguna duda tu calidad de vida estará comprometida…a mí me lo han dicho personalmente, sobre todo chicas jóvenes con muuuuucho  peso, me han dado las gracias no por librarlas de una diabetes o de un problema cardiaco que a su edad ven lejano me han agradecido el hecho de haber recuperado su vida: caminar sin dolor de rodillas, poder sentarse en el suelo y levantarse, poder subir escaleras y no tener que ir siempre en ascensor, poder jugar con sus hijos…. 

¡En un momento en el que se habla tanto de  la autoaceptación, querer perder peso cuando eres obeso es amarte a ti mismo! Autoaceptarse no es conformarse con lo que se es.

Aquí tienes 9 consejos para empezar a perder peso de forma lenta pero segura.

1-Empieza por ser consciente de tu obesidad y busca tus motivaciones

 Si está tratando de perder peso, es porque eres consciente de que eres obeso.

 Este es el primer paso y el más importante. El detonante será tu motivación para mantenerte firme en tus objetivos.

Hay muchas razones por las que quieres perder peso y son muy personales.

Puede ser por  salud, si te falta el aire al más mínimo esfuerzo, por ejemplo. También puede ser lograr un objetivo, un deseo de tener un hijo, un proyecto de vida (viajes…)

Escribe tu motivación  en tu diario, agenda, espejo, nevera…. donde quieras, pero escríbelo.

¡Será la mejor manera de empezar el día motivad@ y a tope!!!

2.Rodéate de las personas adecuadas

 Para lograr tus objetivos necesitarás el apoyo de tus seres queridos.

Este apoyo puede presentarse en diferentes formas. Pueden animarte en tus cambios de hábitos, como no comer comida llena de azucares, ultraprocesados y comida basura  frente a ti o acompañarte a una actividad deportiva. 

Desafortunadamente, si tienes que rodearte de personas que te animen, también tendrás que deshacerte de las personas negativas que podrían distraerte de tu objetivo.

3.Plantéate metas alcanzables y reales.

Perder peso cuando se es obeso, requiere tiempo, paciencia y mucha motivación. Por tanto, no te pongas metas que no podrás alcanzar mental o físicamente, privándote de la comida por ejemplo. 

Los resultados pueden no verse al principio, pero después de varios meses de perseverancia seguro que vas a ver el cambio. 

Ten en cuenta que cada metabolismo responde al cambio de manera diferente. Así que evita compararte.

Eres únic@

4. Cambie tus hábitos alimenticios

La pérdida de peso eficiente comienza con una buena nutrición. 

Una buena cosa a hacer antes de empezar el cambio es en  una hoja anotar  todo lo que se comió en las dos semanas anteriores.

El desafío será identificar en esta lista todos los alimentos que no son compatibles con la pérdida de peso. 

Puedes  encontrar, por ejemplo, que has comida azucares refinados  tres veces a la semana, cuando el azúcar es incompatible con una dieta equilibrada y saludable.

5.   Empieza a cocinar tus platos

Los platos preparados (incluso llamados «saludables») deben evitarse tanto como sea posible. 

Tendrás que cocinar tu mism@, encontrando recetas sencillas, equilibradas y bajas en calorías (en el blog tienes muchas para darte buenas ideas). 

Reduzca sus porciones a medida que avanza (sin morirse de hambre) y no repitas de ningún plato por bueno que esté y mucho que te apetezca. 

Comer sano pasa por cocinar aunque se lo más mínimo!!!

6. Conoce las características de los alimentos

Para comer bien hay que saber cómo son esos alimentos desde un punto de vista nutricional y lo que se está comiendo. 

Los alimentos tienen su propia composición, función y propiedades. 

Hay que aprender a conocerlos y saber que nos aporta cada uno de ellos.  

Por ejemplo, los alimentos con hidratos complejos  (patatas, legumbres, panes, pastas, cereales, etc.) son buenos y necesarios pero no deben de ser lo único a comer ni lo más abundante en nuestro plato. 

Asimismo, es necesario saber evaluar la ingesta calórica de los alimentos y dar preferencia a alimentos con alta carga nutricional y baja carga calórica.

7. Incorporar frutas y verduras en las comidas.

Se recomienda comer  como mínimo cinco raciones de frutas y verduras diarias.

Tal vez no te gusten mucho o no estés acostumbrad@ a comerlos,  pero  la motivación lo requiere, tendrás que integrarlos a partir de ahora en tu vida diaria. 

Por lo tanto, planifique complementar cada comida del día con al menos una pieza de fruta y un tipo de verdura.

8. Participar en actividad física

La actividad física no requiere necesariamente medios económicos ni un gran esfuerzo. 

Solo tienes que cambiar tus hábitos y encontrar las actividades que se adapten fácilmente a tu día. 

Podría ser ir caminando  al trabajo o incluso caminar los fines de semana, etc. La actividad física y una buena alimentación serán tus aliados.

9. Busque asesoramiento profesional

Consulta con un profesional de la salud que tenga conocimientos y esté preparado para ayudarte en el cambio y hacértelo más fácil  y, por qué no, a un buen psicólogo, si es necesario. 

También puedes pensar en un gimnasio o incluso un entrenador personal si lo que más te cuesta es el ejercicio físico  para que te ayude a mantenerte motivado. 

También te ayudará a configurar programas deportivos adecuados y  a establecer metas alcanzables.

Estos consejos te ayudarán a empezar a perder peso de forma eficaz y sin presión.

Recuerda amarte a ti mismo, ¡esa es la clave!

Si te amas a ti mismo siempre buscarás tu mejor versión.

Buenos y saludables días!!!