Receta muy fácil la de esta semana porque éstas tostadas con guacamole casi no son ni receta…
Pero os la comparto porque para todos los fans del guacamole y del aguacate en general os van a encantar.
No siempre las tostadas se hacen con pan; en éste caso están hechas con boniatos, que me encantan…con un sabor parecido al de la patata pero más suave y cremoso.
Nutricionalmente el boniato es parecido a la patata aunque tiene la ventaja respecto a ésta el ser mucho más rico en beta carotenos, nada más hay que ver el color.
También tiene un poquito más de hidratos complejos, pero muy poca cantidad.
El resto de los componentes?…pues ese maravilloso aguacate que nos aporta gran cantidad de grasas saludables, esas que son fundamentales para nuestro organismo pero que curiosamente nuestro organismo no sintetiza y se deben de incorporar en los alimentos.
La receta va muy bien como un primer plato, puedes acompañarla con más verduras y con algo de proteínas para tener todos los nutrientes.
Pues vamos con la receta.
Ingredientes (para dos personas)
- Un boniato grande.
- Una cucharadita de aceite de oliva.
- Un aguacate.
- Un tomate.
- Zumo de medio limón.
- Comino, sal y pimenta.
Elaboración: Empezamos lavando muy bien el boniato, recuerda que lo vamos a llevar al horno con la piel y puede tener tierra.
Una vez que lo hemos lavado, lo partimos en rodajas longitudinalmente.
Le ponemos sal al gusto y la cucharadita de aceite de oliva, repartimos el aceite bien en todas las rodajas.
En una fuente apta para horno que habremos recubierto de papel de aluminio ponemos las rodajas y las llevamos al horno a 180ºC hasta que el boniato este blandito y dorado; vigila bien para evitar que se quemen.
Mientras preparamos el guacamole.
Troceamos el tomate en dados lo más pequeños posibles, abrimos el aguacate, y lo ponemos junto al tomate, añadimos el zumo de limón, sal, pimienta y comino y lo trituramos con la ayuda de un tenedor. Debe de quedar bien triturado pero no un puré…que se vean trocitos de aguacate y tomate.
Una vez que las rodajas de boniato están doraditas las sacamos del horno y ponemos encima guacamole. Es un plato para comer caliente, que es como mejor está el boniato.
Pues con una ensalada por ejemplo de lechuga con un poco de granada, para dar más color al plato, queda un primer plato fantástico!!!
Te animas a probarlo?
Buenos y saludables días!!!